Madidi, en el norte de Bolivia, es una joya de la Amazonía con miles de especies de flora y fauna. Bosques lluviosos, ríos y comunidades indígenas conviven en este ecosistema espectacular.
Es hogar de monos, jaguares, aves exóticas y anfibios únicos, muchos aún en estudio científico. Su acceso puede ser arduo, pero cada trayecto vale la pena.
También ofrece turismo ecológico: caminatas, canopy, observación de fauna, y contacto con culturas originarias. Es un destino para amantes de la naturaleza pura.