El Salar de Uyuni, en Potosí y Oruro, es el mayor desierto de sal continuo del mundo, con unos 10.582 km² y a ~3.650-3.700 msnm.
Se formó tras la evaporación de antiguos lagos durante eras prehistóricas. Su superficie plana crea un efecto espejo espectacular, especialmente durante la temporada de lluvias.
Además, bajo la sal hay reservas gigantescas de litio, potasio y otros minerales de interés mundial.
Visitar el Salar ofrece más: islas de cactus como la Isla Incahuasi, pueblos como Colchani, un cementerio de trenes y el contraste entre cielo y tierra que no se olvida.